La Federación de Pensionistas y Jubilados de Comisiones Obreras en Cantabria (CCOO) ha presentado hoy en rueda de prensa el Observatorio Social de las Personas Mayores de 2022, donde el secretario general de la Federación de Pensionistas y Jubilados de CCOO en Cantabria, José Antonio Sánchez Gimeno, que ha estado acompañado por su homólogo estatal, Juan Sepúlveda, y por la secretaria general de CCOO de Cantabria, Rosa Mantecón, ha reclamado una vez más la urgencia de constituir un Consejo del Mayor Autonómico que marque el futuro de atención a las personas mayores.
En este sentido, ha recordado que ya existen Consejos del Mayor en las dos principales ciudades de la región, Santander y Torrelavega, y ha insistido en que uno a nivel regional, somos la única comunidad que no lo tenemos, supondría el escenario perfecto para señalar las deficiencias que existen en lo que a las personas mayores se refiere en diferentes ámbitos y buscar soluciones posibles a las mismas.
El secretario general de los Pensionistas de CCOO en Cantabria ha hecho hincapié en el futuro de la dependencia en Cantabria y ha subrayado que pasa por el acuerdo interterritorial del 28 de julio de 2022.
Además, Sánchez Gimeno ha aportado algunos datos y estadísticas de interés que recoge el Observatorio. Así ha señalado que más del 23% de la población de Cantabria (135.637 personas) tiene más de 65 años, tres puntos por encima de la media estatal y que en 2018 suponía el 21% y que, por tanto, en 2027 podría alcanzar el 25%.
A este respecto, Rosa Mantecón ha señalado que mientras la población intermedia y la población de menos de 10 años disminuye, en la población con edades comprendidas entre los 10 y los 20 años se observa un incremento, fruto de la entrada de personas migrantes en España durante los primeros años del siglo XXI. Por el contrario, el corte se produce a partir de 2008 con las sucesivas crisis.
“Está claro que la evolución demográfica tiene mucho que ver con los ciclos económicos, con las políticas migratorias, de apoyo a la familia y de emancipación de las personas jóvenes. Dichas políticas tienen una afectación directa en la natalidad, al igual que la distribución territorial y los medios productivos”, ha puntualizado Mantecón.
Aunque no cabe duda de que el aumento de la esperanza de vida es una “buenísima noticia”, Mantecón ha subrayado que tiene una serie de consecuencias en el sistema sanitario público, en los servicios sociales y atención a la dependencia y en el sistema público de pensiones.
“Hay que acometer cuanto antes la mejora de la financiación de la sanidad pública para llegar al 7,2% del PIB y también hay que duplicar el esfuerzo en financiación del sistema de atención a la dependencia para alcanzar el 1,5% del PIB para acabar con las listas de espera y dar una atención con servicios profesionales”, ha apuntado la secretaria general de CCOO de Cantabria.
En cuanto al sistema público de pensiones, Mantecón ha afirmado que se han tomado medidas de calado en los últimos tiempos, “recuperando la revalorización conforme a la inflación y eliminando el factor de sostenibilidad al tiempo que se reforzaba la estructura de ingresos en una segunda fase para garantizar el sistema”.
Por último, Juan Sepúlveda, ha dicho sobre las pensiones que “con la última reforma se garantizan pensiones dignas, se dan garantías y hay una proyección de futuro” y ha enfatizado que se ha hecho con el aval de la Comunidad Europea, apuntando que el nivel de gasto en pensiones en España es similar a la de la mayoría de los países de su entorno.
Además, el secretario general de Pensionistas y Jubilados de CCOO, ha desgranado el contenido del Observatorio Social de las Personas Mayores, “una foto fija de la situación actual del colectivo”, ha dicho. Así, ha hablado sobre el envejecimiento y la calidad de vida de las personas mayores en España y se ha detenido en el cambio digital porque son muchos los mayores que siguen dependiendo de sus familiares para cuestiones que ya son rutinarias.
Sobre la sanidad, Sepúlveda ha apuntado que aunque tenemos un “sistema bueno”, durante la pandemia “se le han visto las costuras” y por ello ha dicho que se necesita que se transfieran recursos porque la salud “no debe ser un negocio sino un servicio”, al igual que ocurre con la dependencia, cuyas residencias deberían ser públicas en su mayoría y no al revés como ocurre en la actualidad.