El consejero de Industria, Turismo, Innovación, Transporte y Comercio, Javier López Marcano, ha felicitado esta mañana al grupo de empresas y organismos que componen el SICC (Sea of Innovation Cantabria Cluster) por el proyecto ‘Bahía H2 Offshore’, un sistema de generación, en condiciones marinas, de combustibles en forma de hidrógeno y amoniaco verde, mediante energía renovable flotante (eólica marina y/o solar fotovoltaica).
El proyecto, que consta de tres fases y un presupuesto total de 7.760.878 euros, ha recibido una ayuda del programa de incentivos a la cadena de valor innovadora y de conocimiento del hidrógeno renovable en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la convocatoria PERTE ERHA (Energías Renovables Hidrógeno y Almacenamiento) de 5.733.705 euros, la segunda de todas las decenas de solicitudes presentadas y que, según Marcano, es un signo de la importancia del proyecto que creará 21 empleos directos además del estable asociado al sector naval, energético e industrial.
‘Bahía H2 Offshore’ desarrollará su primera fase con una duración de 36 meses en un espacio de dominio público de la Autoridad Portuaria de Santander para diseñar, construir, instalar y hacer un seguimiento de una plataforma flotante a escala, integrando las tecnologías de electrólisis alcalina para producción del hidrógeno verde y la simulación del proceso Haber-Bosch para la generación del amoniaco (NH3).
El proyecto está coordinado por el SICC, que cuenta con 28 socios entre empresas y entidades, pero también han colaborado en su promoción los otros dos socios del Supercluster Atlantic Wind (SAW), el clúster FAEN-Ainer de Asturias y Asime de Galicia.
Además de Marcano, en la presentación han estado el presidente de SICC, Luis San Segundo; el presidente de la Autoridad Portuaria, Francisco Martín y el director de Transferencia Tecnológica del Instituto de Hidráulica Ambiental (IHCantabria), Francisco Royano.
San Segundo ha explicado que el proyecto es un reto tecnológico, ya que no se ha hecho ningún proceso de conversión del hidrógeno, del nitrógeno en amoniaco en condiciones offshore y a pequeña escala. En la primera fase se creará un prototipo de generación de hidrógeno y simulación de planta de amoniaco en el Puerto de Santander, en la segunda fase se creará un prototipo con equipo de amoniaco y su integración con una turbina eólica marina operativa, y en la tercera se prevé su integración con un parque eólico en funcionamiento.
El presidente de la Autoridad Portuaria ha explicado que se habilitará un espacio en Raos en tierra y habrá otro de agua para la construcción de una barcaza que contendrá todos los sistemas que la hagan ser autónoma.
Las aplicaciones de ‘Bahía H2 Offshore’ se dirigen al mercado de la eólica marina con el desarrollo de paneles fotovoltaicos flotantes, uno de los pilares para alcanzar el objetivo de descarbonización de la economía europea para 2050. Este desarrollo de la energía renovable marina implica incorporar a estas instalaciones de generación offshore y sistemas de almacenamiento energético. En este punto, el hidrógeno es uno de los vectores que mejor se adapta a las necesidades y el amoniaco, un método idóneo para su almacenamiento, transporte y distribución.