La Policía Local de Santoña ha dado un paso más en la modernización de su equipamiento con la adquisición de las dos primeras pistolas eléctricas de efectos incapacitantes. Esta iniciativa, promovida por la concejalía de Seguridad Ciudadana, que preside Isabel Rueda Ortiz, busca dotar a los agentes de herramientas más avanzadas para mejorar sus condiciones laborales y reforzar la seguridad en sus intervenciones.
Como parte de este proceso, los agentes Óscar Cerecedo y Raúl Sainz han recibido formación especializada como instructores, lo que les permitirá capacitar al resto de sus compañeros en el uso adecuado de estos dispositivos. Su labor será clave para garantizar una implementación segura y efectiva de esta nueva tecnología dentro del cuerpo policial. Las pistolas eléctricas se presentan como un recurso disuasorio importante, adecuado tanto por sus características técnicas como por su capacidad intimidatoria. Estos dispositivos proporcionan una alternativa intermedia entre la defensa personal y el uso de armas de fuego, permitiendo a los agentes afrontar situaciones de alto riesgo con mayor seguridad y menor daño para los implicados. La incorporación de estas herramientas responde a la necesidad de modernizar los recursos de la Policía Local y garantizar una mayor protección tanto para los agentes como para la ciudadanía.
Siguiendo la normativa vigente, la adquisición y uso de las pistolas eléctricas se rige por el Decreto 14/2023 de la región de Cantabria, que establece los protocolos y medidas de formación necesarias para su correcta utilización. Además, los dispositivos adquiridos incluyen cámaras corporales, que permitirán registrar las intervenciones policiales, aportando un mayor grado de transparencia y control en las actuaciones. Con esta medida, el Ayuntamiento de Santoña reafirma su compromiso con la seguridad y la modernización de los servicios públicos, dotando a la Policía Local de los medios necesarios para desarrollar su labor con mayor eficacia y garantías.