En 2014, la coreógrafa Alia Dovidena creó un laboratorio artístico de danza inclusiva (LAD) en colaboración con ASPACE Cantabria, una entidad que atiende desde 1981 a personas con parálisis cerebral, daño cerebral y síndromes cuya causa y evolución son similares.
Desde entonces, esta creadora y pedagoga que dirige también la escuela de danza “Danzaliarte, trata de divulgar -junto a su equipo- el trabajo que se realiza desde este espacio compartiendo su propia metodología y desarrollando espectáculos escénicos implicando a profesionales del sector, aficionados y estudiantes con el objetivo de demostrar que la danza puede ser una herramienta poderosa y transformadora para la sociedad.
Una de esas propuestas ha sido el festival “Con D de danza”, reconocido en la pasada convocatoria de subvenciones de la Fundación Santander Creativa (FSC) y celebrado hace unos meses en el teatro CASYC a beneficio de ASPACE con la diversidad y la inclusión como motor y “fuentes de inspiración”.
Durante el festival se desarrollaron tres acciones distintas: una clase magistral, un coloquio y una gala para celebrar el décimo aniversario del laboratorio. En la clase, dirigida por Alia y a la que asistieron treinta personas, la experta mostró y compartió con los participantes en qué consiste esta metodología específica y necesaria para crear piezas de danza desde una perspectiva integradora.
“La danza mejora la vida de todas las personas” fue el título del coloquio que reunió a unas cincuenta personas de distintos perfiles. Entre ellos, artistas, profesionales de la escena, sanitarios, docentes y también estudiantes. Finalmente, el festival concluyó con una exhibición de danza que pudieron ver más de cuatrocientas personas y en la que actuaron un centenar de intérpretes.
Dovidena explica que, desde que comenzó a trabajar en el laboratorio, su objetivo ha sido precisamente demostrar de manera empírica “que la danza mejora la calidad de vida de todas las personas”. Por este motivo, continúa, “empecé a trabajar en una metodología dirigida a personas afectadas por parálisis cerebral, con movilidad reducida y otros síndromes afines”.
Diez años después, relata, “este trabajo merecía una celebración, una reflexión y un espacio para compartir los resultados y el proceso creativo con otros artistas y con el público en general”.
Colaboraciones
Escuelas de danza como Danzaliarte, Flic Flac, Gloria Rueda y Studio 84 colaboraron con esta iniciativa, que además contó con el apoyo de la Fundación Caja Cantabria, la Asociación de Profesionales de la Danza en Cantabria (Movimiento en Red) y el Gobierno de Cantabria. También colaboró Gou Music y El Diario Montañés.